El trabajar con carretillas elevadoras en Asturias es cada vez más habituales en todo tipo de actividades industriales. El manejo de estos vehículos debe llevarse a cabo de la manera adecuada para evitar cualquier riesgo. El compromiso, la responsabilidad y el conocimiento de su conductor son determinantes para prevenir posibles accidentes, que no solo pueden afectarle a él mismo, sino también al resto de las personas que se desenvuelven por la instalación.
Las primeras medidas de seguridad que deben tomarse son previas a la utilización de la carretilla elevadora. La prevención es esencial, por eso es muy importante verificar el correcto funcionamiento de la máquina y sus sistemas (freno de inmovilización, elevación e inclinación, claxon, señalización de marcha, nivel de aceite, batería y estado de los neumáticos). La tapa del cofre de la batería debe mantenerse cerrada siempre y evitar colocar sobre ella ningún tipo de herramientas u otros objetos metálicos.
Para hacer un buen uso de las carretillas elevadoras en Asturias es importante comprobar que la carga se encuentra equilibrada y segura, así como que no hay nadie en los alrededores, algo que resulta especialmente peligroso en la parte trasera del vehículo. A la hora de circular, la carga deberá mantenerse baja, nunca elevada, y no se abandonará ninguna carretilla de este modo. Respetar las reglas de circulación, mantener la horquilla sin carga a unos 15 centímetros del suelo durante el avance y frenar suavemente, sin brusquedades, son pautas que incrementan la seguridad del proceso.
Una vez terminada la jornada de trabajo con ella, se dejará estacionada con el motor parado, el freno de inmovilización activado y la llave de contacto quitada. Un lugar plano y protegido contra la intemperie es el aparcamiento idóneo.
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